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Las autoridades iraníes han detenido a un ciudadano alemán por tomar fotografías “de instalaciones petroleras” en la provincia de Juzestán, en el sur del país, en medio de tensiones entre Irán y Alemania.
El ciudadano alemán fue detenido cuando realizaba fotografías de las instalaciones petroleras en la localidad de Omidyeh del Juzestán, la provincia iraní más rica en términos de petróleo y gas, informó este martes el diario Jame jam.
El periódico no indicó quién detuvo al alemán, ni cuándo sucedió exactamente.
El arresto se produce en medio de las tensiones entre Irán y Alemania a propósito de las protestas que sacuden el país persa desde la muerte de la joven Mahsa Amini el 16 de septiembre, tras ser detenida por la llamada policía de la moral.
Entre los 20.000 detenidos en las protestas se encuentran un número indefinido de alemanes, además de ciudadanos de otros países europeos, entre ellos España.
Irán ha acusado a Estados Unidos, Israel, Reino Unido, Francia y Alemania de estar detrás de las protestas en las que han muerto cerca de 500 personas en la represión policial y por las que cuatro manifestantes han sido de ejecutados.
Teherán ha señalado directamente a Alemania, cuya embajada es el supuesto centro de la conspiración según algunos medios iraníes, donde se reúnen espías “disfrazados de diplomáticos” para fomentar las protestas en las que se piden el fin de la República Islámica.
Irán ha sido acusada de usar a presos con doble nacionalidad en especial, pero también de otros países, como medida de presión o para intercambio de prisioneros con otros países.
Esto ha sido denominado como la “diplomacia de los rehenes” de Irán por otros países y organizaciones de derechos humanos.
La Justicia iraní confirmó hace una semana la condena a 40 años de cárcel y 74 latigazos de un ciudadano belga por espionaje y cooperación con Estados Unidos contra Irán.
