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“Por qué me lo mataron, él no era ningún delincuente. Dios mío, qué dolor”. Las desgarradoras palabras de una madre al momento de reclamar en la morgue el cuerpo de Rolando Adonay Isidro (de 22 años), quien junto a Samer Josué Ávila Martínez (de 16), fueron asesinados en la colonia Villas del Bosque de Juticalpa, Olancho.
Los dos cuerpos estaban atados de manos y en proceso de descomposición la tarde del domingo.
Los familiares comentaron que Samer Josué había recibido 400 lempiras y se fue a hacer unos mandados y no volvió a la casa, y hasta que les informaron que lo habían encontrado muerto fue que volvieron a saber de él.
Los cuerpos fueron hallados tirados boca abajo en una calle de tierra en una zona boscosa, hasta donde se desplazaron agentes de la Policía y personal del Ministerio Público para reconocer los cuerpos y trasladarlos a la morgue de Medicina Forense donde se les practicó la autopsia.Informes preliminares establecen que a los jóvenes los asesinaron con arma de fuego.
Equipos de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) levantaron evidencias para iniciar las averiguaciones relacionadas al doble homicidio.
En los últimos dos días, al menos cinco personas perdieron la vida de manera violenta en el departamento de Olancho.
En el municipio de San Francisco de la Paz, dos hombres fueron asesinados a balazos cuando departían en la celebración de la feria.
En el mismo hecho tres personas resultaron gravemente heridas, entre ellas un menor de edad.Ese mismo día, otro hombre no identificado perdió la vida en el municipio de Juticalpa, por lo que el cuerpo fue ingresado a la morgue en calidad de desconocido.
Las autoridades policiales mantienen intervenidos cuatro municipios bajo estado de excepción: Juticalpa, Catacamas, Dulce Nombre de Culmí y Patuca.
